Las plantas culinarias o condimentarias son las que se utilizan en la cocina para mejorar el sabor de comidas, aceites y vinagres aromáticos. Aportan un toque diferente, sano y natural a nuestras recetas, además de muchos beneficios para la salud.
La utilización de estas hierbas culinarias en la cocina lo podemos ver plasmado en la cocina mediterránea, o en una gran variedad de cocinas de diferentes países. Dan más sabor a los alimentos suaves, como el pollo y los huevos, atenúan el exceso de sabor de comidas grasas, como el cerdo, y aportan sabores sutiles a la carne, al pescado y a los postres. Se pueden mezclar algunas con mantequilla y untar en bocadillos o en chuletas y carne a la parrilla. También puedes utilizarlas para crear tus propias infusiones.
Tenlas siempre a mano para utilizarlas recién cortadas, en el momento de cocinar. Es imprescindible la exposición al sol para que se desarrollen en perfecto estado, con unas cuantas macetas en el alféizar de una ventana, una jardinera, en la terraza o una pequeña zona del jardín, tendrás una completa gama de sabores y aromas. No olvides regarlas entre dos o tres veces por semana. Solo tienes que seguir unos consejos básicos para recolectar y conservar las plantas culinarias